El Recreativo fue mejor. Tampoco hay que dar mas vueltas al partido de ayer. Osasuna no merecía ir ganando en el minuto 80 por 1-0. Un saque de banda de Azpilicueta rematado de cabeza por Pandiani fue todo el argumento que pusieron los rojillos para ganar el partido de ayer. Se jugó mal, o mejor, no se jugó a nada.
El partido fue horrible desde el principio hasta que mediada la primera parte, Pandiani marcó y puso por delante a Osasuna. A partir de ahí, a defender... y mal.
El Recre acumulaba ocasiones y Roberto bajo los palos era el mejor de los osasunistas. La expulsión de Sergio no hizo sino volcar mas el campo de cara a los blanquizules, hasta que llegó lo inevitable, con unos osasunistas marcados por el pánico. Osasuna ha perdido esta temporada incontables puntos en los minutos finales, y ayer no iba a ser una excepción.
A falta de diez minutos el turco Ersen Martin, que ya había aparecido por el Sadar hace un par de años con su Trabzonsport en la UEFA, lograba el empate y ya en tiempo de descuento, el defensa Morris consumaba el desastre osasunista.
Camacho no hizo los cambios ni bien ni a tiempo. Quitó a Puñal un minuto antes del empate, justo al único jugador que aguantaba el tipo en el centro del campo. Plasil, Masoud y Pandiani acabaron el partido con la lengua fuera, sin aliento, fundidos, se dejaron el alma absolutamente para nada. Ahora, el desastre se masca. Únicamente los resultados de Getafe, Sporting ó Betis mantienen a Osasuna con un hilo de vida. Ahora toca ir a Getafe y habrá que hacerlo de muy distinto modo a lo que se hizo ayer, si no es así no habrá nada que hacer.
Para colmo de males, habrá que jugar sin Nekounam que vio la quinta tarjeta amarilla y por supuesto sin Sergio que será sancionado por su expulsión y sin Delporte que se volvió a lesionar por enésima vez.
El partido fue horrible desde el principio hasta que mediada la primera parte, Pandiani marcó y puso por delante a Osasuna. A partir de ahí, a defender... y mal.
El Recre acumulaba ocasiones y Roberto bajo los palos era el mejor de los osasunistas. La expulsión de Sergio no hizo sino volcar mas el campo de cara a los blanquizules, hasta que llegó lo inevitable, con unos osasunistas marcados por el pánico. Osasuna ha perdido esta temporada incontables puntos en los minutos finales, y ayer no iba a ser una excepción.
A falta de diez minutos el turco Ersen Martin, que ya había aparecido por el Sadar hace un par de años con su Trabzonsport en la UEFA, lograba el empate y ya en tiempo de descuento, el defensa Morris consumaba el desastre osasunista.
Camacho no hizo los cambios ni bien ni a tiempo. Quitó a Puñal un minuto antes del empate, justo al único jugador que aguantaba el tipo en el centro del campo. Plasil, Masoud y Pandiani acabaron el partido con la lengua fuera, sin aliento, fundidos, se dejaron el alma absolutamente para nada. Ahora, el desastre se masca. Únicamente los resultados de Getafe, Sporting ó Betis mantienen a Osasuna con un hilo de vida. Ahora toca ir a Getafe y habrá que hacerlo de muy distinto modo a lo que se hizo ayer, si no es así no habrá nada que hacer.
Para colmo de males, habrá que jugar sin Nekounam que vio la quinta tarjeta amarilla y por supuesto sin Sergio que será sancionado por su expulsión y sin Delporte que se volvió a lesionar por enésima vez.
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